jueves, 10 de octubre de 2013

No lo entiendo...

Acabar así, colgados. Nunca imaginamos que acabaríamos así, atrapados a 5 metros de altura enredados en la rama vieja de un pino que no ha reparado en lo que tiene a sus pies pues su peocupación anda más arriba peleando por la luz con el resto de sus compañeros del bosque. Nunca imaginamos que tras aguantar el peso de nuestro destino terminaríamos suspendidos en el aire. Nunca imaginamos que aguantar el olor y el calor de esos pies terminaríamos suspendidos en el tiempo, en el recuerdo en medio de un espacio natural.
No entiendo que hacemos aquí, merecimos un más digno final.

Cuando caminas por el bosque, puedes encontrar un sinfin de cosas y objetos olvidados y abandonados conscientemente, pero lo que no me esperaba encontrar en medio de la nada es este par de zapatillas deportivas colgadas de la rama de un pino. No se si se dejaron como señal o simplemente se abandonaron debido a que llegaron al final de sus días, de cualquier manera no deberían encontrarse ahí, pero por desgracia allí siguen pues no hubo manera de conseguir que se descolgasen. Allí permanecerán como curiosidad suspendida en el aire y meida por el viento para todo aquel que pase bajo las ramas de aquel pino.